Entre el océano y las montañas, Madeira se revela como un auténtico jardín flotante del Atlántico.

Sus espectaculares paisajes, sus carreteras panorámicas, sus coloridos pueblos y su clima templado durante todo el año la convierten en un destino excepcional. Gracias a esta estancia en estrella desde Ribeira Brava, podrás explorar a tu ritmo los lugares imprescindibles de la isla, mientras disfrutas de la comodidad de un único alojamiento: el Hotel do Campo 4*, un remanso de paz en la costa sur.

Itinerario sugerido (ejemplo de 7 noches):

Día 1: Llegada a Madeira

Día 2: El oeste salvaje: Porto Moniz y las piscinas naturales.

Día 3: Funchal, la capital de los mil colores.

Día 4: El este auténtico: Pico do Arieiro, Ribeiro Frio y Santana.

Día 5: Acantilados y tradiciones: Cabo Girão y Câmara de Lobos.

Día 6: Senderismo y relajación: las levadas.

Día 7: Día libre o crucero por el mar.

Día 8: Salida.

Este programa se proporciona a título indicativo para ilustrar el posible desarrollo de su estancia. No constituye un compromiso contractual y puede adaptarse según sus deseos, las condiciones meteorológicas o las condiciones locales.

Tenga en cuenta que el orden de las actividades puede modificarse sin que ello altere el interés del programa.

Llegada al aeropuerto de Funchal, recogida del vehículo de alquiler y traslado al hotel (unos 30 minutos). Instalación en el Hotel do Campo 4*, situado sobre el mar, con magníficas vistas al valle y al océano.
Primer paseo por el encantador centro de Ribeira Brava, un pueblo típico y acogedor.

Día 2: El oeste salvaje: Porto Moniz y las piscinas naturales

Itinerario sugerido: Ribeira Brava - Ponta do Sol - Paul da Serra - Porto Moniz - Seixal - São Vicente - regreso.

Atraviesa la meseta de Paul da Serra, dominio de los vientos y los brezos, antes de descender hacia la costa norte. En Porto Moniz, admira (o disfruta, según la temporada) las famosas piscinas naturales formadas por la lava volcánica.

Regresa por la carretera costera de Seixal y São Vicente, entre túneles, acantilados y frondosos bosques.

Día 3: Funchal, la capital de los mil colores

Pon rumbo a Funchal, una ciudad animada y llena de flores.

Descubre el mercado de Lavradores, el jardín botánico, la catedral Sé y el barrio histórico de Santa Maria.

Posibilidad de subir al Monte en teleférico (unos 12 € ida y vuelta) y bajar en un trineo tradicional de mimbre (unos 25 € para 2 personas). Tiempo libre para pasear por el puerto o visitar una bodega de vino de Madeira (degustación libre a partir de 5 € por persona).

Sal temprano para llegar al Pico do Arieiro (1818 m), uno de los miradores más bonitos de la isla.

A continuación, desciende hacia Ribeiro Frio para dar un tranquilo paseo hasta el mirador de Balcões, en pleno bosque laurel, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Continúa hacia Santana, famosa por sus casas tradicionales con tejados de paja, símbolo de Madeira.

Regresa por Machico, el primer pueblo colonizado por los portugueses en el siglo XV.

Día 5: Acantilados y tradiciones: Cabo Girão y Câmara de Lobos

Por la mañana, visita el espectacular mirador de Cabo Girão, uno de los acantilados más altos de Europa (580 m), dotado de una plataforma de cristal suspendida.

Continuación hacia Câmara de Lobos, un encantador puerto pesquero muy querido por Winston Churchill. Posibilidad de visitar una explotación agrícola para descubrir las plantaciones de frutas tropicales (unos 10 € por persona).

Regreso a Ribeira Brava para disfrutar de una tarde libre.

Descubre las levadas, unos canales de riego únicos que serpentean por el corazón de la naturaleza de Madeira.

Paseo recomendado: Levada das 25 Fontes o Levada do Risco, en Rabaçal (aproximadamente 3 h, nivel fácil a medio).

Por la tarde, disfruta de la playa de Calheta o de la piscina panorámica de tu hotel.

Entrada al Museo del Ron de Calheta: unos 4 € por persona.

Te alojarás en el Hotel do Campo 4*. Situado en  Ribeira Brava, este encantador establecimiento cuenta con una piscina panorámica y te ofrecerá una hospitalidad madeirense de calidad.

Disfruta de un día inolvidable en Porto Santo con una excursión en barco, un recorrido por la isla, una tarde libre y el regreso a Funchal a bordo del "Lobo Marinho".

También apodada la Isla de las Flores, ¡Madeira te promete una estancia colorida!

Ubicada frente a la costa marroquí, en el corazón del Océano Atlántico, este pedazo de tierra es una verdadera joya donde la naturaleza, aún densa y virgen, se funde en el horizonte con el azul celeste del océano.

Puedes visitar la isla como desees y disfrutar de panoramas excepcionales. Sube a la altura de Pico Ruivo para disfrutar de una vista impresionante, decide pasear por las calles de Funchal, la capital, o perderte en pequeños pueblos de pescadores auténticos como Câmara de Lobos. Con el océano hasta donde alcanza la vista, ¡este pequeño jardín flotante no dejará de hacerte soñar!

Déjate llevar por el sonido de las olas...