Vive una experiencia inolvidable en Canadá con este viaje de 9 noches. Sube a bordo de varios trenes, una forma original de descubrir el este del país, y conoce Toronto, Montreal y Quebec a tu aire o reservando las visitas opcionales.

Tu itinerario de 9 noches
Día 1: Llegada a Toronto
Día 2: Día libre en Toronto (Excursión a las Cataratas del Niágara opcional con suplemento)
Día 3: Día libre en Toronto
Día 4: Toronto - Montreal en tren
Día 5: Día libre en Montreal (City tour por el casco antiguo opcional con suplemento)
Día 6: Día libre en Montreal
Día 7: Montreal - Quebec en tren
Día 8: Día libre en Quebec (City tour opcional con suplemento)
Día 9: Día libre en Quebec
Día 10: Regreso desde Quebec

*El orden de las actividades puede variar sin cambiar el interés del programa.

Día 1: Llegada a Toronto
Llegada a Toronto y traslado privado a tu hotel.
Toronto es la ciudad más grande de Canadá y un importante centro financiero desde 1977. Es el centro cultural del Canadá anglófono, con museos que no tienen equivalente en el país y unos vibrantes teatros, orquestas sinfónicas, ballet nacional, ópera y mucho más. No te pierdas la Torre CN, la estructura independiente más alta del país, el Museo Real de Ontario, Chinatown, el Mercado de Kensington, Yorkville, etc.

Día 2: Día libre o Excursión a las cataratas del Niágara (opcional con suplemento)
Regálate una excursión en inglés (con suplemento) para admirar las cataratas del Niágara. Las cataratas, una auténtica maravilla natural, nunca han dejado de fascinar a viajeros de todo el mundo. ¡Hay tanto que hacer en las cataratas del Niágara! La excursión incluye la actividad Viaje tras las cataratas, el almuerzo en un restaurante panorámico con vistas a las cataratas y una parada en el pueblo victoriano de Niagara-on-the-Lake de regreso a Toronto para una cata de vinos de hielo.

Día 3: Toronto
Día libre para seguir explorando Toronto.
Puedes optar por una visita guiada privada de Toronto en inglés (2h30): la visita incluye la Torre CN (por fuera; entrada no incluida), Ontario Place, Chinatown, el Antiguo y el Nuevo Ayuntamiento, el Parlamento y el Rogers Center.

Día 4: Toronto - Montreal (545 km, 5h30 en tren)
Salida en tren hacia Montreal en clase Económica (opción a clase Business con suplemento). Esta metrópoli ofrece los mil y un atractivos de las grandes ciudades del mundo. Multicultural, mezcla su acento francés con el de sus numerosas comunidades culturales y enamora con su ambiente americano-europeo. Su centro urbano vibra al pie de la montaña, mientras que su historia está arraigada en sus barrios antiguos cercanos al río.

Día 5: Montreal
Elige la opción (con coste adicional) de una visita guiada a pie de 2h30 por el Viejo Montreal para descubrir las calles de la colonia francesa, desde Ville-Marie hasta nuestros días.
El distrito histórico y su Viejo Puerto te harán retroceder por la historia de una de las grandes metrópolis de América, desde la fundación de la ciudad a través de todas las épocas.
El guía privado te conducirá por un laberinto de encantadoras calles que albergan numerosos edificios y lugares históricos. Explora la cuna de Montreal y su rico patrimonio en este viaje único al pasado de nuestra ciudad.
Durante el resto del día, no te pierdas el Parque Olímpico, sede de los Juegos Olímpicos de 1976 y hogar de la torre inclinada más alta del mundo. También encontrarás el Biodomo, un lugar mágico donde coexisten cuatro ecosistemas.

Día 6: Montreal
Día libre en Montreal.

Día 7: Montreal - Quebec (275 km - 3h30 en tren)
Salida en tren hacia la ciudad de Quebec en clase Económica (mejora a clase Business opcional con suplemento).
Atención, puedes caer bajo el hechizo de la ciudad de Quebec, ¡la única ciudad fortificada del Norte! Te recomendamos que abandones la autopista después de Trois Rivières y tomes el Chemin du Roy, que bordea el río San Lorenzo.

Día 8: Quebec
No te pierdas la opción (con coste adicional) de una visita guiada privada a pie durante 2h30.
Durante el recorrido, tendrás la oportunidad de ver:
- La Place Royale, donde se fundó la ciudad en 1608 y donde encontrarás el ambiente de Nueva Francia.
- El Museo de la América Francesa.
- El Seminario de Quebec, la primera escuela para jóvenes interesados en ser sacerdotes.
- El Colegio de las Ursulinas de Quebec, la primera escuela de Norteamérica fundada en 1659 por las monjas para jóvenes francesas y amerindias.
- La Basílica de Notre-Dame de Quebec, en el corazón del casco antiguo y del Barrio Latino.
- La Catedral de Sainte Trinité.
- El Château Frontenac, uno de los hoteles más famosos del mundo e icono de la ciudad de Quebec.
También verás el río San Lorenzo, el Puerto Viejo y muchos otros lugares igualmente interesantes, lo que hace que tu visita sea de lo más memorable.
Con este telón de fondo cargado de historia, la capital ofrece un calendario de actividades de plena actualidad, con grandes festivales, obras de teatro y exposiciones... ¡Y el alojamiento y la gastronomía son de primera clase!

Día 9: Quebec
Día libre en la ciudad de Quebec.

Día 10: Regreso
Traslado privado al aeropuerto de la ciudad de Quebec según el horario de tu vuelo.

Durante tu aventura canadiense, descansarás en una habitación Estándar en los siguientes hoteles (o similares):

• En Toronto: Chelsea Toronto (o similar)
• En Montreal: Le Nouvel Hotel & Spa (o similar)
• En Quebec: Hotel Champlain (o similar)

*Hoteles listados en el programa, en caso de no disponibilidad de estos, alojamiento en hoteles de similar categoría.

Acompañado de un conductor de habla inglesa, salida por la mañana temprano para descubrir las famosas Cataratas del Niágara. Esta excursión de día completo te permitirá descubrir este lugar famoso durante décadas, tanto en verano como en invierno. Regreso a Toronto al final de la tarde.

Salida a pie con el guía por el Viejo Montreal para descubrir edificios y sitios históricos: la Place d'Armes con su basílica (entrada no incluida), el Puerto Viejo, la Place Jacques-Cartier y las calles adoquinadas.

*Guía en francés o inglés.

Descubre este edificio emblemático de Toronto: la Torre CN. Podrás disfrutar de la vista panorámica de la ciudad desde una altura de 346 metros con sus paneles de vidrio. ¡Emoción garantizada al mirar el vacío bajo tus pies!

Recorre a pie el Vieux-Québec (Viejo Quebec) con un guía para descubrir los lugares históricos: la Place Royale, el Puerto Viejo, la Terrasse Dufferin o el famoso Château Frontenac, uno de los hoteles más fotografiados del mundo.

*Guía en francés o inglés.

Sube a la clase Business en lugar de Económica para disfrutar de más comodidades durante tus viajes en tren.

La clase Business incluye comida, bebida (también alcohólicas) y acceso a las salas VIP de las estaciones

Toronto es la ciudad más grande de Canadá, con más restaurantes y teatros en vivo que cualquier otro lugar del país. Desde la famosa CN Tower hasta el Harbourfront Centre con sus tiendas y restaurantes junto al lago, pasando por el nuevo y moderno Distillery District, Toronto es merecidamente la puerta de entrada más popular a Canadá.

Montreal ha evolucionado mucho en los últimos años y hoy en día alberga una explosión de cultura, gastronomía y otros atractivos turísticos que resultan realmente sorprendentes. Montreal te fascinará, desde el Viejo Puerto y el casco antiguo con calles llenas de tiendas, restaurantes y edificios históricos, hasta más afuera con el parque Mont Royal, el Parque Olímpico o la playa urbana y uno de los tesoros más singulares de la ciudad, como es su red peatonal subterránea, conocida como RÉSO, compuesta de 30 kilómetros de túneles y galerías que conectan distintas partes de la ciudad e interior de algunos edificios y comercios, y que también albergan una amplia variedad de restaurantes y tiendas.

Se suele decir que Quebec es un pedazo de Europa dentro de América, y se comprueba fácilmente al pasear por sus calles empedradas que recuerdan a un pueblecito francés o descubrir el precioso Château Frontenac, quizás el edificio más bonito de la ciudad. Las murallas de piedra de la ciudad delatan los más de 400 años de historia que encierran sus calles, entre cafés con encanto, catedrales, tabernas, artistas callejeros y cierta atmósfera de romanticismo, esta urbe no deja indiferente a ningún visitante.